Sin lugar a dudas el tema de esta semana en los diversos medios de comunicación, en la opinión pública y en los corrillos políticos ha sido la permanencia del actual Secretario General de Gobierno del Estado de Colima, Arnoldo Ochoa González, en el gabinete de José Ignacio Peralta Sánchez. Lo anterior en virtud de que se ha manejado como inminente su salida por la presión que actualmente han estado ejerciendo a través de un plantón afuera de palacio de gobierno de personas que se dicen afectadas por Ochoa González por un despojo de sus tierras. Además se ha señalado que este personaje no acreditó el examen de control y confianza , por lo cual no es apto para el cargo que actualmente ocupa. Y por si lo anterior fuera poco, por el pobre desempeño de la actual administración en el área de seguridad pública, en donde Arnoldo Ochoa tiene la responsabilidad legal de coordinar dicho gabinete , según la ley orgánica respectiva.
Como en anteriores entregas, aquí les dejamos una breve síntesis de lo que los columnistas de Revista Colima XXI opinaron sobre este tema de la semana.

«Insostenible en el gabinete, sus posibilidades de capitalizar el cargo para conseguir su cuarta diputación federal plurinominal o el escaño en el Senado que le falta a su carrera política, chocan con las aspiraciones de las nuevas camadas de priistas cansados de ver cómo en las barajas del PAN y PRD sí hay relevo generacional, mientras en el PRI se repiten y se repiten las cartas.»
Columna: «HUELE A SANTO». Leer completa

«A José Ignacio y a Don Arnoldo ya se les hizo bolas el engrudo, se enredaron al contradecirse, al brincar a tontas y a locas en suelo tan parejo, pues mientras el primero jura y perjura desconocer los resultados de la ‘basculeada’ que le dieron al segundo, mismos que todavía está esperando sentadito para no cansarse, el interfecto niega haberse sometido al polígrafo y demás instrumentos de evaluación en la “actual administración”, y que hace seis años si fue evaluado y lo aprobó. ¡“No pos’ sí!»
Columna: «Aclarar paradas». Leer completa.

«Nacho logró obtener su título de gobernador no por interés hacia el estado, sino por un interés personal: la vanidad. Aparecerá en los libros de historia de Colima, enriquecerá y fortalecerá la influencia familiar. Logros obtenidos. Ahora debería dejar el puesto a quien pueda, pero sobre todo, quiera trabajar por los que nacimos y vivimos aquí. Antes de que hunda más al estado, antes de que lo deje sin activos. Que se lleve a sus secretarios corruptos Arnoldo Ochoa y Noriega, a su secretario alcahuete Meiners, a su secretario elitista Dominguez y a su secretario virtual Villaseñor. Que ya no hagan más daño al estado.»
Columna: Nacho, un mueble en palacio de gobierno. Leer completa.

#Dentro de éste cuadro descuadrado por un funcionario borracho como Arnoldo Ochoa González dentro y fuera de sus funciones, no estaría de más revisar a fondo si es conveniente sostener a un tipo REPROBADO por alcohólico para ejercer la función pública por la PGR (CISEN) y, al que el inútil Gobernador de Colima protege aduciendo que: `Todavía NO tenemos los resultados del examen de control de Arnoldo Ochoa.`
Columna «Quien le estorba a Colima es “Chupitos” Arnoldo Ochoa». Leer completa.

Hoy no hablaré de la ingobernabilidad que permea la vida de los colimenses, crisis que incluso se ha hecho visible a través de los duros cuestionamientos de corrupción hechos recientemente al secretario general de gobierno, Arnoldo Ochoa, sino sobre los riesgos de que esta ingobernabilidad se convierta en caldo de cultivo, paradójicamente, para que la autoridad estatal cometa más actos arbitrarios en contra de la ciudadanía. Algunos de estos actos arbitrarios tienen que ver con aquellas decisiones de gobierno que fueron tomadas de forma unilateral y sin haber siquiera tomado el pulso ciudadano, o yendo deliberadamente en su contra.
Columna El Ecoparc, a plebiscito. Leer completa.

10 RAZONES POR LAS QUE ARNOLDO DEBE SALIR DEL GABINETE: